Queremos hablaros sobre la matronatación, arte y disciplina que prepara a los bebés para «nosecuantas» cosas de la vida futura, además de ser saludable y hasta aconsejable, pero…..
Hemos visitado algunos sitios en nuestra ciudad donde imparten éstas clases para informarnos. En casi todos nos han contado que pueden empezar a partir de los 4 meses, que están preparados para esto y más. Lo teníamos bastante decidido, pero esta misma mañana cuando hemos ido a vacunar a Nora de los 4 meses, se nos ha ocurrido preguntar a la pediatra (que por cierto es la caña).
Nos ha dicho, con estupendísimo criterio, que es una decisión propia de los padres, como los agujeros de las orejas y que somos nosotros los que debemos valorar y decidir.
Como pediatra, nos ha dicho que quizá es un poco pronto, que los alrededores de una piscina son lugares húmedos, donde hay productos químicos (cloro), hay más facilidad de contagiarse de hongos (no por falta de higiene, sino por el entorno en sí), la piel de nuestra bebé, y la de todos, es muy delicada todavía, que con 4 meses aún no están vacunados del todo…. En definitiva, que si es para chapotear un poco, pues sí, pero que lo ve un poco precipitado.
Y en eso estamos… Hemos pensado en esperar otros dos meses, hasta los 6.
Total, si lleva sin nadar desde que nació, quizá puede esperar un poco más…
Pingback: Matronatación, beneficios y nuestra experiencia – Uno más uno… Son tres!